lunes, 2 de enero de 2017

Arcanos

Dar el adiós a tiempo
a los recuerdos
de carne y hueso,
       de versos y licor,
a los besos invaluables,
a cada uno de los minutos
   inolvidables
construidos con dolor.

Se vuelve incierta
la hora del ocaso,
cuando clamo por paz,
 por cordura, por ninguna,
siendo la noche impía
         una larga súplica
  que no es mía
a la sorda Luna.

¿Cómo deshacerse de la idea
             de eternidad?
¿Cómo ignorar los arcanos
      dictados por la mente?
Es imposible huir.
Andar por laberintos
          y en ellos morir,
naciendo eternamente.